La técnica NIR mide la respuesta de la luz NIR en una muestra de material y utiliza esta información para determinar la composición u otras cualidades, consiguiendo así estimar los niveles de nutrientes en los productos alimenticios. A través de modelos matemáticos dedicados a la matriz que se quiere medir, los dispositivos NIR son capaces de entregar una predicción de concentración de, como en este caso, materias primas y productos terminados de la industria alimentaria.

Es durante el proceso de calibración cuando se desarrollan modelos de predicción que caracterizan la relación entre los espectros NIR de un material en particular y condiciones como la humedad, el aceite, la proteína y la fibra, entre otros.

Esta tecnología, de espectroscopia de infrarrojo cercano (NIR), es un enfoque preciso y no destructivo para el análisis de muestras. Tradicionalmente, es realizada por científicos en el laboratorio pero, hoy en día, encontramos en el mercado dispositivos portátiles que acercan esta técnica a diferentes espacios de aplicación que, una vez validado un modelo de predicción, puede utilizarse para obtener resultados de nuevas muestras del material en segundos, ahorrando tiempo y dinero en los análisis de laboratorio.


Compartir

Califica la lectura


Publicidad