La pulpa de tomate posee todo el potencial para aportar beneficios nutricionales y para la salud.
Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, los tomates son el segundo cultivo vegetal más popular, solo aventajado por las papas, con un promedio anual de consumo per cápita de 71 libras en jugo, salsa y pasta. La historia de fondo es que entre el 10-30% de estas semillas, piel y pulpa, no cuentan con un mercado seguro en la alimentación humana. Esto se traduce en un estimado de 750 mil toneladas métricas de pulpa de tomate seca, potencialmente disponibles para los mercados de alimentos para mascotas y ganado.
Teniendo en cuenta que los EE.UU ocupa el lugar quinto en la superficie mundial de tomates cultivados, la pulpa de tomate podría ser un ingrediente fácilmente disponible para los alimentos de mascotas. En este sentido, estamos viendo un creciente número de alimentos para mascotas, donde la pulpa de tomate aparece en la lista de ingredientes.
¿Esta creciente popularidad está en función del costo y la disponibilidad, o la pulpa de tomate proporcionará algún beneficio nutricional en los alimentos para mascotas? Sí y sí.
De la planta al polvo
La pulpa de tomate se comercializa habitualmente en se forma seca (Con un 5-10% de humedad aprox.) en una composición de alrededor del 20% de proteínas, 13-15% de grasa, 3-5% de cenizas y 25-35% de fibra cruda. La Asociación Norteamericana de Control de Alimentos Balanceados la define como "la mezcla seca de piel, pulpa y semillas trituradas."
Esta pulpa comienza con el procesamiento de tomates enteros en jugo, salsa o pasta. Los tomates se presionan hasta que expulsen el jugo, luego se separan de las semillas, piel y la mayor parte de la pulpa. El residuo resultante contiene bastante humedad (aprox. 60-70%) el cual se debe secar para que no se eche a perder.
Una vez seco, el residuo se tritura o pulveriza hasta lograr un polvo. Esta trituración, que además de producir un tamaño de partícula consistente, también libera los aceites que se encuentran en las semillas. Estos aceites de semillas de tomate son considerables (cerca del35% de la semilla) y predominantemente insaturados (aprox. el 82%; Giannelos et al, 2005), lo cual los hace susceptibles a la oxidación. Así que después de la trituración, se añade un conservante antioxidante para su almacenamiento a largo plazo. El producto final es un polvo fino, casi polvoriento de color naranja- rosado con olor a tomate.
Opción de fibra functional
Uno de los primeros trabajos de investigación publicados que evaluaban la pulpa de tomate en las dietas de mascotas, informaba que cuando se alimentaban a los perros con harina a base de maíz y soja, suplementada con pulpa de tomate, la digestibilidad fue comparable a esas dietas suplementadas con pulpa de remolacha o de uva (Allen et al., 1981). Unos años más tarde, Fahey et al. (1990) reportó de que la fibra dietética total (una medida de la fibra nutricionalmente funcional) que se encuentra en la pulpa de tomate era comparable a la pulpa de remolacha y el salvado de trigo. Cuando se incluyó la pulpa de tomate en las dietas para perros en un nivel similar a otras fuentes de fibra, la digestibilidad, la frecuencia de eliminación y el volumen fecal fueron similares.
Más recientemente, Swanson et al. (2001) informó que la pulpa de tomate tenía un contenido total de fibra dietética de aproximadamente 57% y que la mayoría de esta fibra era insoluble (53% vs. 4% soluble). Después de 24 horas de fermentación (in vitro), la pulpa de tomate se degradó un 35%. La producción de ácidos grasos de cadena corta fue moderada en relación a otras fuentes de fibra y dio como resultado una alta proporción de butirato - ácidos grasos de cadena corta beneficiosos. Una de las principales preocupaciones con las fuentes de fibra es si producen flatulencia; estos investigadores informaron que la producción de gas durante un período de 24 horas fue significativamente menor que la mayoría de otras fuentes de fibra.
La pulpa de tomate comúnmente se incorpora en fórmulas secas al 3-7% de la mezcla de ingredientes y tiene poco o ningún impacto en el procesamiento de alimentos.
El color es fundamental
Teniendo en cuenta que sólo este aporte de fibra, podemos evaluar la historia y conexión que tiene el tomate con la salud humana. Los tomates y su contenido de carotenoide licopeno antioxidante, se han relacionado con la prevención de numerosas enfermedades humanas, incluyendo algunas formas de cáncer y enfermedad de la arteria coronaria, a través de una reducción del colesterol.
El licopeno es el pigmento responsable del color rojo de los tomates y a diferencia de muchos otros carotenoides vegetales, este persiste a través del procesamiento. Por ejemplo, se ha reportado que el contenido de licopeno en la pulpa de tomate es de 281 mg / kg (Botsoglou et al., 2004).
Mientras que un vínculo entre tomate / licopeno y la prevención del cáncer, o los beneficios para el corazón no se ha demostrado en perros y gatos, los experimentos con perros han demostrado que después de una dosis oral, el licopeno se absorbe y distribuye a lo largo de los tejidos del cuerpo (fácilmente Korytoko et al., 2003). La inclusión de la pulpa de tomate al 1% de la dieta, conjuntamente con otras frutas y verduras antioxidantes, ayuda a la retención de la función cognitiva en perros de edad avanzada (Milgram et al., 2005).
También se ha informado que la pulpa de toma contiene concentraciones relativamente altas de vitamina E (224 ppm) y el total de tocoferoles mixtos (2059 ppm), además de otros fitosteroles como el campesterol, el estigmasterol y el sitosterol-B (King y Zeidler, 2004).
Ajustes para el formulador
Aunque sabemos bastante sobre la pulpa de tomate, todavía carecemos de informes de evaluación en las dietas para gatos y los estudios sobre las diferencias entre los canales de suministro brillan por su ausencia.
Algunos críticos opinan que los tomates no son seguros debido que pertenecen a la familia de las solanáceas, o que la pulpa de tomate es un bio-acumulador de pesticidas y herbicidas, pero podemos afirmar que estas sugerencias no tienen validez. Más bien, la pulpa de tomate parece ser segura y eficaz, con un registro demostrado como fibra funcional y fuente viable de vitaminas y carotenoides antioxidantes bioactivos.
Como ingrediente en la caja de herramientas del formulador, la pulpa de tomate es un ingrediente disponible a costo competitivo, que se perfectamente en la etiqueta y se adapta muy bien a las fórmulas de alimentos para mascotas.
Autor: Dr. Greg Aldrich is president of Pet Food & Ingredient Technology Inc.
Publicado Originalmente en Petfood Industry
Te podría interesar: Innovaciones en Fibra - El momento de brillar
Origen vegetal
04/11/2022