A diferencia de los animales de granja, la nutrición de las mascotas debe seguir un concepto nutricional más allá del mínimo y funcional, permaneciendo dentro del rango óptimo, según la Figura 1. Sin embargo, este rango permite muchas variaciones para cada formulación, pudiendo abarcar una diversidad muy amplia de dietas, creando productos con variaciones en ingredientes e incluso nutrientes, pero que al final consiguen obtener una óptima salud.
Figura 1- Gráfico que representa la curva dosis-respuesta del consumo de nutrientes.
Fuente: adaptado de Gross et al. (2010).
Según la figura anterior, podemos imaginar dónde encajan los productos de las principales categorías comerciales que existen actualmente en los alimentos para mascotas: económicos, premium y super premium. Las raciones económicas presentan los nutrientes en la curva de área óptima, pero más cerca del mínimo. Los productos premium, en cambio, avanzan más hacia el punto más alto de la curva.
Las raciones super premium por su parte, se encuentran en el punto más alto del gráfico sin llegar al área de "exceso". Como la tendencia es siempre desarrollar productos de calidad superior, el formulador debe ser consciente del equilibrio entre lo grande y lo exagerado de las modas nutricionales para no llegar a excesos que comprometan la salud de perros y gatos.
Así, la nueva tendencia es satisfacer las necesidades de nutrientes esenciales de manera óptima para cada especie y, en conjunto, presentar productos con propiedades funcionales y nutracéuticas que promuevan efectos beneficiosos sobre la salud, garantizándole al cliente la longevidad de su mascota.
Mencionamos tres puntos que el formulador bien informado debe agregar a las dietas para lograr una óptima nutrición:
1) SALUD INTESTINAL
La microbiota gastrointestinal juega un papel importante en la salud animal. Los prebióticos y probióticos son aditivos alimentarios capaces de mantener un equilibrio adecuado de la microbiota (Bielecka et al., 2002).
Varios estudios han demostrado los efectos beneficiosos sobre la salud de perros y gatos, tales como mejora en la consistencia y olor de las heces, regulación del sistema inmunológico, prevención y mejora en casos de diarrea y efectos antiinflamatorios y reguladores en el intestino en enfermedades del tracto gastrointestinal. (Vasconcelos et al., 2018).
Los microorganismos utilizados como probióticos suelen ser componentes no patógenos de la microbiota normal, como las bacterias del ácido láctico (géneros principales Lactococcus, Lactobacillus, Streptococcus, Bifidobacterium y Enterococci). Por lo general, la recomendación es incorporar probióticos después de la extrusión del alimento, debido a la alta temperatura utilizada en el proceso. Sin embargo, sabemos que con el avance de la investigación y el desarrollo de productos, están llegando al mercado probióticos para uso industrial, capaces de resistir el calor de extrusión.
Los prebióticos, por su parte, son ingredientes nutricionales no digeribles que actúan selectivamente sobre la microflora, estimulando el crecimiento y la actividad de una o más bacterias intestinales beneficiosas (ANFALPET, 2010). Se pueden obtener de forma natural en semillas y raíces de algunas hortalizas como achicoria, remolacha, alcachofa, espárragos, cebada, centeno, soja, garbanzos y el lupino. La forma más común disponible en el mercado son las paredes celulares de la Saccharomyces cerevisiae o las paredes celulares de la levadura o mananoligosacáridos (MOS), que junto con los fructooligosacáridos (FOS), incluyen inulina y oligofructosa.
2) REFUERZO ANTIOXIDANTE
Al igual que con los alimentos, las reacciones de oxidación también ocurren en las células de los tejidos vivos. En este proceso se forman radicales con electrones desapareados en la última capa que presentan una intensa reactividad química, formando los llamados radicales libres. Normalmente se producen para neutralizar agresiones no deseadas al organismo, como bacterias y virus, pero cuando están en exceso y / o no se neutralizan, a menudo pueden causar daños irrecuperables en membranas, ADN y enzimas (Borges et al., 2003).
Así, el papel de los antioxidantes en la dieta llegó a tener una connotación más amplia y, cuando están presentes o incorporados en los alimentos, pueden ser eficaces para combatir la formación de radicales libres en los tejidos animales (Borges et al., 2003).
Los antioxidantes más utilizados han sido el alfa-tocoferol (vitamina E), el betacaroteno (precursor de la vitamina A), el ácido ascórbico (vitamina C) y los polifenoles.
3) CONTROL DE LA INFLAMACIÓN
Los ácidos grasos son capaces de atenuar los efectos del proceso inflamatorio al disminuir la síntesis de eicosanoides y citocinas inflamatorias.
Los ácidos grasos ácido linolénico (ALA), ácido eicosapentaenoico (EPA) y ácido docosahexaenoico (DHA) no pueden ser sintetizados en cantidades suficientes por el organismo, por lo que se deben aportar a través de la dieta.
En algunas especies, los ácidos grasos EPA y DHA se pueden sintetizar a partir del ácido linolénico, pero los perros y gatos tienen una capacidad limitada para realizar esta conversión. Por ende, es de suma importancia que se proporcionen en la dieta.
El perfil de estos ácidos grasos en una dieta se puede cambiar según la fuente de grasa aportada: tejidos animales, como los de animales marinos que se alimentan de algas y tienen altas concentraciones de DHA en sus tejidos, mientras que las fuentes de origen vegetal tienen mayor concentraciones de ALA en su constitución. El aceite de pescado, por ejemplo, es una gran fuente de EPA y DHA.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:
- ANFALPET - Manual do Programa Integrado de Qualidade Pet. 2010. 612p.
- BORGES, F. M. O., SALGARELLO, R. M., GURIAN, T. M. Recentes avanços na nutrição de cães e gatos. In: SIMPÓSIO SOBRE NUTRIÇÃO DE ANIMAIS DE ESTIMAÇÃO, 3, 2003 São Paulo. Anais... Campinas, p. 21-60, 2003.
- BIELECKA, M.; BIEDRZYCKA, E.; MAJKOWSKA, A. Selection of probiotics and prebiotics for synbiotics and confirmation of their in vivo effectiveness. Food Res. Int., Amsterdam, v.35, n.2/3, p.125-131, 2002
- GROSS, K. L.; YAMKA, R. M.; KHOO, C.; FRIESEN, K. G.; JEWELL, D. E.; SCHOENHERR, W. D.; DEBRAEKELEER, J.; ZICKER, S. C. Macronutrients. In:
- HAND, M. S.; THATCHER, C. D.; REMILLARD, R. L.; ROUDEBUSH, P.; NOVOTNY, B. J. (Ed.). Small Animal Clinical Nutrition. 5 ed. Topeka, EUA: Mark Moris Institute, 2010. p 49-105.
- VASCONCELOS, S. S. R. S. L.; Uso de probióticos manipulados e seus efeitos na saúde de cães e gatos: uma revisão de literatura. João Pessoa, 2018.
Fuente: All Pet Food
Te podría interesar: La ciencia y la tecnología en los ingredientes de precisión
Sobre el autor
Erika StasieniukErika Stasieniuk es Zootécnica y Doctora en Nutrición y Alimentación de Perros y Gatos en la UFMG. Es socia fundadora de SFA Consultoria, cuyo objetivo es ayudar a las empresas de alimentos e ingredientes para perros y gatos a desarrollar sus productos y producir alimentos seguros y de calidad.
Sobre el autor
Ludmila Barbi T. BomcompagniEs veterinaria, con una maestría en Ciencia Animal de la UFMG en el campo de la nutrición animal monogástrica. Desde 2016 se desempeña como consultora técnica nutricional para perros y gatos, cuando fundó BEM NUTRIR VETERINÁRIA, empresa de nutrición clínica para mascotas.
Contenidos del editor
Formulacion
16/07/2024
Adsorbentes de olores: cómo utilizarlos estratégicamente en alimentos para mascotas
Por
05/12/2023
¿Hacia la Premiumización o (tristemente) la Economización del mercado en LA del petfood?
Por